Bettina

Soy Bettina de Anchorena, desde mi infancia crecpi­ entre plantas, desarrollé esta pasión de la mano de mi madre Isabel y mi abuelo Emilio, ambos excelentes jardineros.

La jardinería era un juego al principio, un hobby que me hacia inmensamente feliz.

Estudie ciencias de la Educación, trabaje 5 años hasta que me di cuenta que lo mí­o era jardinear, diseño de espacios verdes, y trabajar con la Naturaleza. Empecé con arreglos florales, ambientando fiestas, iglesias hasta que a los 35 años decidí­ hacer de mi hobby una profesión. Estudie en Espacios verdes, en Pampa Infinita con Martina Barzi y Jose Casares, John Brookes, Jill Billington y Andrew Duff, dos años muy intensos donde realmente descubrí mi vocación, mi pasión.

Desde entonces doy clases de plantación en Pampa Infinita, comparto con mis alumnos aprendiendo de la planta correcta en el lugar correcto, las clasificaciones, visitas a jardines y viveros.

Durante 7 años participé del grupo de Jardinerí­a Sarandís, coordinado por la Ingeniera Agrónoma Elsita Schulte, quien me acompañó en el conocimiento y la valoración de nuestra Flora Nativa. En Uruguay estudié flora indí­gena en el Jardín Botánico. Conté con la ayuda del Ingeniero Raúl Nin.

Sin duda este es un camino de ida. Hice del arte mi aliado. La plantación, sus colores, sus texturas, son los elementos; el lugar, el espacio, el lienzo. Estudié dibujo y pintura con Anna Rank por 6 años.

Sigo explorando todo acerca de las plantas nativas, las buenas compañías pastizales, praderas, Jardines ecosistémicos, sustentables.

Intervenciones sutiles como si hubiesen estado allá siempre y tratar de captar el espíritu del lugar, creo firmemente en que todo lugar es un lugar!

Desde 1999, estoy plantando nativas en los Ombúes en La Barra de San Juan, Colonia Uruguay mi jardín experimental, laboratorio, mi lugar en el mundo. Observo cómo se desarrollan, cómo se comportan, qué les gusta y qué no. Por eso digo siempre Soy Argentina, pero tengo raíces en Uruguay.

Me dedico a sembrar verde en el cemento, privilegio el manejo orgánico al tradicional, el volver a la naturaleza.